17 marzo, 2007

Mitos en el pádel

Algunos mitos sobre las palas de pádel, que seguramente todos hemos escuchado alguna vez...

Mito: "…y cuanto mas pesada la pala mas despide…"

Falso: El peso de la pala no es el determinante absoluto de su capacidad de golpe. Un choque elástico como es el que se produce durante el impacto pala/pelota se basa en transferencias de energía. Si tenemos una pelota de fútbol de plomo moviéndose a 1 metro por segundo y esta choca con una pelota de padel de aluminio moviéndose a 100 metros por segundo la energía cinética (que es igual a la masa del cuerpo por su velocidad) de ambas será equivalente y cuando choquen se quedarán en el mismo lugar del impacto sin desplazarse ni para un lado ni para otro. A la misma velocidad, con mas masa, mas energía, pero para mover esa masa hemos de gastar también mas energía ya que no se genera sola sino que se la transferimos con nuestro brazo. Si nuestra pala de pádel es más pesada mas tardaremos en acelerarla, lograremos menos velocidad de impacto y nos cansaremos más rápido. Ahora si es mas liviana la moveremos a mayor velocidad y nos cansaremos menos. Por eso hay un balance entre el peso y nuestra fuerza.

El circuito profesional es el que dicta los avances en esta materia y a medida que mejoran las performances de los jugadores se cambian los balances. Pero ojo! siempre se tiende al menor peso. Es un hecho que en los últimos años las raquetas de tenis vienen perdiendo peso y no lo contrario. De madera a aluminio y de aluminio a carbono. Esto es para mejorar el rinde de los jugadores ya que se cansan menos y logran mayores velocidades de impacto.


Mito: "…cuanto mejor sea tu técnica tendrás que usar palas mas pesadas…"

Falso: Ya queda contestada en la anterior.


Mito: "…las mejores palas de pádel son las que tienen carbono, kevlar, etc. son absolutamente necesarios para lograr una pala de mayor calidad y mejoran el juego…"

Falso: Las pruebas de laboratorio demuestran que el composite fibra de vidrio/epoxi es lo suficientemente fuerte para poder ser usado en las estructuras de las palas de padel y excede las necesidades estructurales de las mismas. Esto demuestra que la fibra de carbono y otros materiales modernos solo aportan, de forma efectiva, una reducción en el peso de la estructura y por supuesto una mejora en las propiedades mecánicas, pero estas no son necesarias ya que exceden por mucho los requerimientos a los que están sometidas las palas.

Leido en DabberSport.